El escritor e investigador Carlos Skliar comenzó, desde el inicio del aislamiento social y obligatorio frente a la pandemia del COVID 19, a realizar una serie de conversaciones virtuales desde su Facebook personal. “El deseo de decir algunas cosas en voz alta y la escucha muy atenta, muy tensa, muy sensible”.
El planteo del autor de libros como Escribir, tan solos, Hablar con desconocidos y No tienen prisa las palabras fue que estos encuentros no tuvieran ningún tiempo predeterminado y que se erigieran, simplemente, desde “una posibilidad de recibir”.
Sin embargo, remarcó que no le interesaba su papel de “centro” de estas reuniones y, en cambio, sí la importancia de rescatar “una manera de elaborar o tener tiempo para elaborar lo que se dice, lo que se escucha y lo que se piensa y donarlo en forma de escritura”, es más, agregó, “de una relación que plantearía entre la lectura y la escritura”.
“Son tiempos distintos, dolorosos, congelados, todos estamos en una cotidianeidad extraña, rara, que por momentos tienen rasgos de tensión o de aceleración muy crueles” y esta forma de encuentros y de relaciones virtuales son un modo que encontró el autor de conversar desde sus redes sociales.
En las conversaciones, como ejercicio, a modo de preguntas, se propuso insistir en cuatro cuestiones fundamentales:
¿Qué hay en la soledad y en la fragilidad que podamos pensar juntos para estos modos provisorios, precarios, dolorosos de estar?
¿Qué pasa con las infancias en tiempos de aislamiento y donde el mundo está mediado y asediado por pantallas?
¿Qué nos dicen las personas con “discapacidad” sobre la vida y el mundo?
¿Qué pueden, qué podrían nuestras formas educativas de estar, de permanecer y de hacer cosas juntos?
Los encuentros, que Skliar denominó como “Conversación entre Cualesquiera” se producen todos los lunes, a partir de las 18, en una página de la red social Facebook: @paginacarlosskliar